Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 13 segundos
Este inmenso traidor (como agente de corporaciones y potencias extrajeras) y genocida (la plandemia es prueba de ello) llamado Pedro Sánchez, que da motivos no sólo para una rebelión, si no, hasta para una dictadura para poner orden en una España liquidadada y muerta e invadida por inmigrantes ilegales que viven mucho mejor que muchos españoles (eso es un hecho, no una opinión), pasará a la historia por ser un atrevido ignorante fundado en un sustrato psicópata, a fin de perpetuarse a cualquier precio y acabará provocando una guerra civil, de una u otra forma.
Hemos mantenido desde las 21 h. de la tarde de las ñultimas elecciones generales que había un tongazo de por medio y que habría gobierno de la anti España con Sánchez a la cabeza. Lo seguimos manteniendo.
Para Sánchez la mal llamada amnistía (en tanto no tiene cabida en nuestro ordenamiento jurídico) es un ejercicio de malabarismo que le permitirá perpetuarse en el poder como máximo exponenente de la anti España.
El PSOE representante ese digno heredero del régimen franquista (también el PP), en su versión más degenerada, en tanto gran parte de sus miembros han estado vinculados con el franquismo o al menos tienen ascendientes en tal régimen.
Ahí está la hemeroteca donde estos degenerados antiespañoles en formato sociolistos clamaban contra la amnistía.
Elocuente es la frase de la antiespañola Carmen Calvo por aquel entonces vicepresidenta primera del Gobierno de España, que afirmaba en el Senado:
«La única respuesta posible es que eso (la ley de Amnistía) no es planteable en un Estado de derecho y democrático porque, sería suprimir uno de los tres poderes del Estado, que es el judicial».
Pues bien, el régimen del 78 (alumbrado con la oprobiosa Constitución del 78) como máxima expresión de la liquidación de España, no permite la amnistía por argumentos constitucionales de peso fundados en el art.62.i del referido texto constitucional (que abominamos por lo antedicho).
1º.- Contempla el indulto (perdón al condenado), no la amnistía, en tanto no es un indulto, ni tan siquiera general, sino una suerte de recurso del que se tira en pos de un fin político que es una pretendida reconciliación nacional (como si hasta entonces España hubiese estado congelada en el tiempo en una suerte de limbo franquista).
Esa reconciliación nacional es una falacia utilizada como excusa para buscar la gobernabilidad con la complicidad de la dictadura de los números, incluyendo para ello a la anti España (quien debiera estar ilegalizada, juzgada y condenada).
2º.- Durante ese inmenso engaño que fue el llamado periodo constituyente, permeado por la masonería, se contempló la figura de la amnistía, habiéndose presentado enmiendas para incluir la amnistía y éstas fueron rechazadas.
Y para que vean que nuestro criterio es el bueno, y no otro (el contrario está mantenido por la anti España, que debiera estar desterrada en el Averno) los propios letrados del Congreso de los Diputados (esa asquerosa institución en la que sólo anida que la anti España), informaron en contra de la amnistía, allá por el 2021.
Tenemos que recordarles que desde aquí ya informamos de la ilegitimidad de la propia Contitución del 78 en dos entradas que pueden leer aquí y aquí.
No obstante, aún hay ilusos que creen que el Senado y el Judicial (comisariado dirijido pro Sánchez) podrán parar este nuevo latrocinio.
Pues sí, ilusos. Pero para nosotros, jodidamente realistas, blanco y en botella.
No se preocupen, que habrá amnistía por cojones, que no por razones, y el pueblo español, inane, ovejuno y zombificado lo permitirá, sumándose a ello la pasividad del Borbón y de las Fuerzas Armadas para mayor verguenza suya y desprecio de todos los españoles a los que hay recordar a estos emasculados con uniforme, que dar un golpe de Estado saldrá gratis, como les va a salir a los catalufos el suyo.
Cobardes españoles, que sepan que aquí, en Pasión por España, no comulgamos con ruedas de molino.